Aceite Esencial Melissa

Aplicada sobre la piel posee esa misma capacidad calmante mediadora, una interesante propiedad reguladora y normalizadora de la secreción sebácea. Posee también propiedades antisépticas que la hacen ideal para pequeñas irritaciones cutáneas. Además, su agradable perfume alimonado confiere sobre la dermis un frescor muy placentero. Para el cabello confiere la recuperación del pH regulando la grasa y ayudando a que crezca más saludable, aportándole brillo y suavidad. Previene la alopecia; ya que su acción antiséptica ayuda a mejorar y prevenir enfermedades fúngicas y bacterianas; así como también infestaciones con piojos y liendres.

Destacan las propiedades interesantes para uso externo: antibacterianas, cicatrizantes, sedantes, antivirales, flebotonicas, antiflogísticas. Se usa en casos de herpes, varices, cuidado de la piel durante radioterapia, caspa, eczema, picaduras de insectos, herpes zoster, alergias, migraña. Para piel con eczemas, alergias, piel grasa y piel con impurezas/acné.

En dosis recomendadas, máximo 3% en cosméticos tópicos

El aceite esencial de melisa tiene un aroma herbáceo y a limón que crea una atmósfera agradable y tranquila. Vida en anaquel: 180 días

Regenera su tono natural; evita el envejecimiento y proporciona alivio en enfermedades como acné, eccemas, psoriasis, descamaciones, infecciones fúngicas y bacteriana.